¡Hola! Buen día, me gustaría compartir experiencias que tuve en mi niñez.
Espero que si las publican o en cuanto vean este mensaje me respondan, pues me gustaría encontrar a alguien con alguna situación similar pero con algún otro desenlace.
La primera historia no recuerdo bien la fecha pero fue antes de que tuviera 12, pues a los 12 le empece a dejar de tener tanto miedo a la oscuridad.
Era de noche y como siempre yo dormía con una lámpara de Winnie poh era de yeso, la que más me gustaba pues alumbraba todo el cuarto.
Desde siempre le había tenido un pavor a la oscuridad, tenía pesadillas y veía cosas no tan frecuentemente, pero las veía.
En ese entonces aún seguía despierto, ya era noche, no podía conciliar el sueño y mi papá como de costumbre se había parado para apagar la lámpara, me hice el dormido pues si me hallaba despierto me regañaría.
Siempre antes de dormir acudía con mi mamá para que se acostara a mi lado, esa noche no estaba, la lámpara apagada y yo si entiendo que me veían.
Mi cuarto era un pasillo, que daba camino al comedor y a otros cuartos que dirigían al baño, al patio y a un cuarto de huéspedes.
En cuándo agarre fuerzas y coraje me pare rápidamente y prendí la lámpara y con la misma velocidad regrese a mi cama.
Pasaron unos minutos y seguía sin poder dormir y por alguna extraña manera voltee a ver a la lámpara.
Esta en un instante se empezó a prender en llamas, pero lo raro era que el foco estaba intacto.
Las llamas empezaron desde arriba hacia abajo yo obviamente lleno de miedo seguía viendo pero asustado.
En cuanto el recubrimiento del foco se quemó y el foco se chamusco y trono, la luz se fue y para acabar la lámpara de callo.
En ese momento escuche que mis padres por el ruido se levantaron y ya estaban en camino a ver que sucedía.
Fueron escasos 30 segundos en los que sentía que ese o esa «cosa» o «ente» que tiró la lámpara me brincaría o me atacaría.
No paso a mayores, mi papá acudió, prendió la luz y como suele suceder me echaron la culpa.